Les presentamos un informe de un caso en el que un gato anciano de 20 años con un tumor cerebral (adenocarcinoma invasivo) recuperó su energía y apetito tomando Cordy, sin tratamientos de esteroides ni quimioterapia.

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Ejemplo de control del progreso del tumor cerebral usando Cordy

¿Qué es un tumor cerebral?

Al igual que en los humanos, los tumores cerebrales son relativamente comunes en los perros y gatos.
Existen tumores cerebrales primarios y tumores cerebrales metastásicos, que son cánceres que se originan en otros órganos y se diseminan al cerebro.

Los síntomas del tumor cerebral varían según la parte del cerebro afectada, y pueden no presentar síntomas o mostrar convulsiones similares a la epilepsia, inclinación de la cabeza, movimientos en círculos, ataxia, nistagmo (movimiento involuntario de los ojos) y parálisis facial, entre otros.

Control del tumor cerebral con Cordy

Gato, 20 años (Tsukushi-kun, macho)
Diagnóstico: Tumor en la frente, adenocarcinoma invasivo

A la izquierda está la foto tomada en el momento del diagnóstico de cáncer. A la derecha, la foto tomada al comprar más Cordy.
Al principio se puede ver que la zona alrededor de los ojos y la nariz estaba abultada debido al tumor cerebral.

Una semana después de comenzar a tomar Cordy, Tsukushi-kun experimentó una gran cantidad de sangrado y pus, lo que sorprendió a la dueña, pero él parecía aliviado.
Después, la hinchazón se redujo notablemente (la foto de la derecha muestra su rostro después de la mejora).

Foto tomada en el momento del diagnóstico de cáncerFoto tomada al comprar más Cordy

Informe de la propietaria (※Opinión personal)

Después del terremoto, adopté 16 gatos y Tsukushi-kun fue uno de los dos últimos que quedaban.

Alrededor de enero de 2016, empezó a sentir una molestia en la cara.
Basándome en los síntomas de los gatos que había perdido hasta entonces, sospechaba que no era algo bueno.

Poco después de sentir la molestia, su ojo comenzó a sobresalir y lo llevé al veterinario para varias pruebas.
Aunque los resultados de las pruebas tardaron en llegar, el examen patológico confirmó un tumor cerebral.

El veterinario me dijo: «Es un tumor muy maligno que no responde a esteroides ni quimioterapia. El tumor crecerá y hará que el ojo sobresalga y la nariz se comprima, lo que hará que no pueda oler, pierda el apetito, se debilite y finalmente muera. Si en algún momento parece estar sufriendo o con dolor, una opción puede ser la eutanasia.»

Recorrí tres clínicas veterinarias, pero todas dieron el mismo diagnóstico.
Incluso enviaron la muestra al Hospital Universitario de Osaka, pero el resultado fue idéntico.

Me dijeron que no sería recomendable realizar ningún tratamiento debido a su avanzada edad de 20 años.

Aunque mi familia y yo habíamos decidido no someterlo a quimioterapia ni cirugía basándonos en experiencias anteriores, nos sentíamos indecisos al recibir el diagnóstico de cáncer.

Finalmente, concluimos que, debido a su falta de fuerza física, la quimioterapia o cirugía no eran viables, y así que decidimos utilizar Cordy, mantenerlo caliente y rezar por lo mejor.

Una semana después de comenzar a darle Cordy, experimentó una gran cantidad de pus y sangre por la nariz. Aunque me sorprendió, el gato no parecía más débil y se veía aliviado.

Desde ese momento, recuperó su energía y apetito, y comenzó a jugar con los otros gatos.

Durante los meses siguientes, hasta el día antes de su muerte, mantuvo su apetito y vivió con energía, finalmente falleciendo de vejez.

Al incinerarlo, me informaron que, en casos de cáncer, los huesos suelen ser frágiles o negros, pero en su caso, los huesos eran robustos y no parecían afectados por la enfermedad.

Me alegró mucho que pudiera vivir normalmente hasta sus últimos momentos.


La foto de la izquierda fue tomada dos semanas antes de su muerte. La de la derecha, el día anterior a su fallecimiento.
Hasta el final, mantuvo su apetito y jugó con los otros gatos.
Falleció rodeado por su familia, tranquilo y en paz.
Foto tomada 2 semanas antes de fallecerFoto del día antes de fallecer
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Cordy sin carga para el cuerpo

Como en este caso, no es raro que gatos y perros de edad avanzada o con problemas físicos no puedan someterse a tratamientos agresivos que carguen el cuerpo.
Incluso en esos casos, Cordy puede ser integrado sin cargar el cuerpo, y la impresión general es que permite pasar días tranquilos.

En nuestro laboratorio, investigamos si la administración de Cordy puede ajustar el sistema inmunológico y esperamos que tenga efectos sobre el cáncer.

Si tiene alguna pregunta, por favor contáctenos.

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Informe de caso
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